2 de julio de 2011

Efectividad vs. Eficiencia: ¿qué es mejor?

"Eficiencia es hacer el trabajo bien. Efectividad es hacer el trabajo adecuado. Primero sé efectivo" (Mathew Parvis)



En muchas ocasiones nos enfrentamos a la telaraña que existe en nuestra mente de todas las cosas que tenemos pendientes y que "debemos hacer". Ante ese imperativo "deber hacer", dicha telaraña se vuelve más densa y conforme se va haciendo más grande, junto con ella crece nuestra ansiedad, nuestro miedo y nuestra desidia.

Algo que debemos considerar conforme pasamos por la vida con esa interminable lista de "Cosas por Hacer", es pensar si dicha lista está conformada por actividades que realmente nos gustan y si nos encontramos haciendo el trabajo correcto para concretar nuestras metas.

Como recordarán en la anterior publicación escribí respecto a la bendición del tiempo. Retomando dicho tema, podemos darnos cuenta que a menudo pasamos mucho tiempo haciendo algo bien cuando no deberíamos ni siquiera de estarlo realizando.

Desperdiciamos nuestro esfuerzo en cosas que no merecen la pena; nos enfocamos tanto por resolver una situación o sacar adelante un proyecto por el simple hecho del "deber hacer", que nos llegamos a exigir a tal grado que nuestra ansiedad se hace presente, nuestro espíritu creativo se desvanece, y terminamos por enviar todo al olvido, lo cual no soluciona el problema, por el contrario, lo hace más grande (para nosotros).


Perdemos tanto tiempo queriendo hacer todo a la perfección, que dejamos en segundo término cosas que realmente requieren de nuestra atención. Por ejemplo, recuerdo que cuando nació mi primer hija me dedicaba a limpiar mi casa a la perfección ya que consideraba que nunca era suficiente. Sin embargo, al mismo tiempo de ser madre primeriza, estaba iniciando con mi negocio de diseño, el cual dejaba de lado, ya que consideraba que era mejor tener una casa limpia para mi bebé que nutrir mi propia empresa. Así, un uso eficaz de mi tiempo hubiese sido trabajar en el crecimiento de mi negocio.

Simplemente piensen con cuánta frecuencia se pasan el tiempo haciendo algo bien cuando en realidad deberían estar haciendo algo más. Y por lo regular, dejamos "para después" todo aquello que nos gusta y nos nutre el espíritu. Un ejemplo claro de ello es cuando nosotras, como Mamás, por lo general hacemos esto: "Sólo tengo que lavar los platos, sacar la ropa de la lavadora, tenderla y después jugaré con mis hijos", o bien, "primero debo terminar todos mis pendientes antes de ir a pedir informes de las clases de piano que tanto me interesan".

Por lo regular nos molestamos con nuestros hijos por interrumpirnos cuando estamos limpiando la casa, "sacando" los pendientes del trabajo, cuando el uso eficaz de nuestro tiempo es probablemente disfrutar de nuestros hijos antes de que crezcan y tomen el camino de sus propias vidas. Esto no significa que no atendamos nuestros "deberes", pero sí significa que tomemos consciencia de si estamos siendo primeramente eficaces y si estamos realizando el trabajo correcto.

A partir de las reflexiones que realicen los invito a que tomen la decisión de utilizar su tiempo con la mayor eficacia posible. Por supuesto que a veces ser eficaz es poseer la habilidad de las multitareas, pero sin excederse, y discriminando lo realmente importante de aquello que no lo es.

Queridos lectores, cuando estén haciendo el trabajo correcto sean eficaces y asegúrense de hacerlo bien (no a la perfección). Si en alguna casión se han sentido perdidos en esa telaraña de actividades "por hacer" o han trabajado arduamente sin terminar nada, deténganse y piensen una y otra vez si están siendo eficientes o eficaces.

Espero con mucho gusto sus comentarios.

¡Hasta la próxima!

2 comentarios:

  1. estoy totalmente deacuerdo contigo amiga realmente tenemos ke enfocarnos en lo ke nos gusta hacer y darle el tiempo al ke realmente lo merece que son a las personas ke amamos!! pero se ke vienen cosas buenas, cada dia estamos mas cerca y lo ke estas sembrando esta generando una reaccion en cadena ke pronto dara frutossss!!! atte: LuisArmando(:

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  2. ¡Mil gracias por tu comentario Luis Armando! En muchas ocasiones nos enfocamos en actividades que no tienen sentido, y lo peor del caso, en situaciones que en lugar de nutrirnos nos flagelan.
    ¡La familia primero! Totalmente de acuerdo.

    ¡Saludos!

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